El uso de la hipnosis con fines terapéuticos se conoce como hipnoterapia.
Se trata de una terapia muy compleja y para comprenderla debemos detenernos en varios puntos. Primero vamos a realizar algunas consideraciones sobre la hipnosis en general para comprender un poco de qué se trata y qué es la hipnosis.
La Asociación Profesional de Hipnoterapia de Oxford en el Reino Unido, se refiere a la hipnosis como una terapia en la que la persona experimenta una alteración en su estado de conciencia, acompañado de profundas sensaciones de relajación.
Durante la hipnosis se reducen los niveles de atención y el paciente se libera de distintas ataduras que le permiten contestar preguntas de gran importancia formuladas por el profesional capacitado.
Una técnica de autohipnosis curiosa, basada, como la gran mayoría, en curiosas metáforas prácticas, es la técnica del interruptor. ¿En qué consiste esta técnica de hipnosis – autohipnosis?. Se lo explicaré si quieren probarla en sus casas. Es un ejercicio sencillo. Siempre le recomendaré que aprenda con un profesional a aplicar este tipo de técnicas de una manera eficaz en sus casas. Les pido que por favor hagan un esfuerzo por imaginar tan vivamente como puedan al realizar el ejercicio y no lo hagan cuando estén conduciendo o estén realizando alguna actividad delicada o peligrosa.
1. De entrada inicie una relajación física y psicológica básica. Intente por un momento, estando sentado o recostado, tensar todos los músculos de su cuerpo durante 3 segundos y enseguida suéltelos. Realícelo dos o tres veces. Realice unos ciclos de inspiración/expiración profundos verificando que su cuerpo comienza a relajarse. Note sus músculos distendidos y suéltelos. Piense en imágenes que le puedan ofrecer una cierta paz y tranquilidad, como estar en una playa o en la montaña, sin ser molestado. No se mueva y relájese, dejando su mente divagar sin pensar nada en concreto.
2. Vamos a utilizar un símil eléctrico en esta técnica de hipnosis. Imagine que tiene dos grandes haces de cables que bajan de la base de su cerebro y que los cables se separan entrando en cada nervio y cada fibra de su cuerpo.
3. Uno de ese par de cables controla todas las funciones básicas de su cuerpo, involuntarias, como la presión arterial, la frecuencia cardíaca y la respiración. El otro conjunto de cables se conecta a los músculos voluntarios y a los nervios de su cuerpo, por lo que si usted procediera a cortar la energía que tramsmite el segundo par, todos sus nervios perderían tensión y los músculos se “relajarían” (es metafórico, los nervios no pierden tensión, pero se trata de facilitar un cambio empleando la imaginación).
4. Ahora levante el dedo índice de la mano izquierda (o derecha) e imagine que lo que hay debajo del dedo índice es un interruptor de luz que puede “apagar o encender” todo ese conjunto de músculos y nervios voluntarios. Ahora el interruptor está “encendido” en posición “ON”.
5. Cierre los ojos, respire profundamente y busque reforzar ese estado iniciar de relajación.
6. Y cuando usted lo desee haga un movimiento reflejo para “apagar el interruptor” bajando su dedo índice y pulsando sobre el imaginario botón que “desactiva” toda la musculatura voluntaria del cuerpo. Y entre en un profundo estado de relax, completo y déjese llevar por una relajante sensación de paz y calidez.
Una vez en esa fase de autohipnosis, usted puede utilizarla para proveerse instrucciones de cambio comportamental, abandono de adicciones, reducción de dolor o malestar, imaginar cambios físicos y psicológicos, etc. Pruebe esta técnica. En nuestra mente, en nuestro cerebro, reside el centro del cambio psicológico. No se resigne y trabaje por mejorar de sus problemas.
Alberto Bermejo -Gabinete de Psicología EIDOS