¿Cómo pueden los amigos ayudar a un paciente con cáncer?
Los efectos secundarios de un tratamiento de quimioterapia no sólo afectan al físico del paciente con cáncer, también a su ánimo y sus relaciones sociales. Un experto psicólogo te explica cómo afrontarlo.
En ocasiones, el padecer cáncer puede producir un perjuicio en las relaciones personales y sociales. Con respecto a las relaciones de amistad, si éstas están fuertemente establecidas serán una fuente importante de apoyo, sobre todo en los momentos de recuperación entre las etapas del tratamiento.
En cambio, si se trata de amistades superfluas, en donde lo que les une no es un lazo de sinceridad y confianza, sino únicamente el compartir unas inquietudes o actividades en común, es posible que el paciente vaya a ir perdiendo esas amistades. Primero, porque una persona con cáncer que siga un tratamiento de este tipo no tendrá el mismo tiempo que antes para cultivar esa amistad, y puede que no tenga salud ni ánimos para continuar con esas actividades. Segundo, porque por los mismos motivos algunos amigos empezarán a contar cada vez menos con esa persona, hasta llegar un momento en que ya no la tengan en cuenta en sus planes.
Es por ello necesario también establecer una ordenación con respecto a las amistades, para atenderlas en la medida de lo posible cuando el paciente éste recuperado entre las sesiones del tratamiento de quimio.
De todas formas, el paciente no debe de juzgar el comportamiento de los demás en función de su propio punto de vista, pues para los demás la vida no ha cambiado, ellos siguen con sus mismas expectativas y forma de vivir y ha sido el propio paciente quien se ha separado de esa vida debido a sus circunstancias personales.