Menos pensar, más sentir…
Menos enojo, más risa…
Menos hablar, más escuchar…
Menos juzgar, más aceptar…
Menos mirar, más hacer…
Menos queja, más gratitud…
Menos miedo, más amor…
Nuestro hemisferio izquierdo es secuencial, y el derecho simultáneo. El hemisferio derecho es el que nos capacita para interpretar cosas de forma simultánea y relacionarlas.
El hemisferio izquierdo analiza los detalles mientras el derecho sintetiza y muestra una foto global de las cosas. El derecho es quién nos da la capacidad de sintetizar la misma, de coger varios elementos y ponerlos todos juntos para que tengan un significado. El hemisferio derecho establece relaciones entre diferentes elementos. No analiza una nariz, una boca, unas cejas, luego los ojos y después la orejas, simplemente relaciona y sintetiza todos los elementos de un rostro y lo ve como un todo.