Detrás de todos mis pensamientos de mis movimientos, de mi descanso, estoy yo. Detrás del silencio interior.
Detrás de esa paz, de esa tranquilidad, soy yo el sujeto que vive y experimenta esa sensación de bienestar.
Una vez se llega a esa profunda sensación, hay que seguir manteniéndola en una mente tranquila, totalmente silenciosa.
Para llegar al centro de nosotros mismos, tenemos que recorrer un camino con diversas fases y estados, pasando por la plenitud y la soledad, tenemos que atravesar todas las capas intermedias hasta llegar a descubrir nuestro auténtico yo
Alcanzar este nivel de profundidad no es labor de un día, hay que interiorizar en nuestra mente hasta que llege el día en que se produzca ese gran silencio, un silencio en todo nuestro ser, no sólo en un sector de la mente.
Cuando todo está silencioso, todo tiene un clima especial, parece que todo haya cambiado por unos momentos, como si hubiéramos entrado incluso en otra dimensión.
Ese estado no suele durar, es algo muy trascendente.
Es en ese estado de gracia, milagro de paz, cuando desaparecen todos los problemas, desaparece el temor, las dudas, por unos instantes percibimos una paz infinita.
– Dalinia –
Cada nuevo grado que vayamos adquiriendo en la interminable experiencia del descubrimiento de nuestro interior a través de cualquier técnica de relajación nos quedará grabado en nuestro inconsciente, por tanto debemos ser conscientes de ello y saber que dentro nuestro poseemos el tesoro de nuestro control y siempre, siempre, podemos entrar y conectar con nuestra paz interior.
Paz interior – Silencio interior
El silencio interior significa:
La capacidad de volar sin alas,
la capacidad de caminar sin pies,
la capacidad de observar sin molestar,
la capacidad de escuchar sin interrumpir,
la capacidad de entrar en ti y ver tu realidad.
Tu verdad solo la puedes conocer en absoluto silencio.
Sin el silencio tu alma no tiene claridad, no tiene luz.
La falta de silencio, es la ira, el orgullo, la prepotencia.
El silencio no es soledad, es limpieza, es pureza.